miércoles, 17 de agosto de 2016
LA ARQUITECTURA EN LA EDAD MEDIEVAL
La planta basilical, derivada de la basílica romana, se incorporó a la arquitectura paleocristiana con la cristianización del Imperio romano a partir del siglo IV. En la arquitectura bizantina se desarrolló la planta centralizada (como la planta de cruz griega), que se utiliza también en el arte carolingio. La planta de cruz latina fue común en la arquitectura religiosa de la cristiandad latina en la Edad Media a partir del románico, al divulgarse el modelo de iglesia de peregrinación en el camino de Santiago. La cabecera de las iglesias se destacaba con un ábside, a veces multiplicado (absidiolos). De las iniciales cubiertas planas se pasó a las abovedadas, reservando el mayor desafío técnico: la cúpula, para espacios destacados. La cúpula de Santa Sofía de Constantinopla se planteó explícitamente como una superación del paganismo representado por la cúpula del Panteón de Roma. Las fachadas, inicialmente muy poco significativas, se fueron desarrollando cada vez más, acogiendo decoración escultórica y flanqueándose por torres, que también se disponían en otros puntos, especialmente en el crucero, donde en caso de no cubrirse con una cúpula, se levantaba un cimborrio.
Mientras que en Europa Oriental el monasterio desarrollaba sus propios modelos (monasterios del Monte Athos), en Occidente las reformas cluniacense (Monasterio de Cluny) y cisterciense (arquitectura cisterciense, en la transición del románico al gótico) fueron incorporando elementos arquitectónicos definitorios, como el claustro, el refectorio, la sala capitular, el scriptorium, etc.
Baptisterio, iglesia y campanile (torre campanario) en la Catedral de Pisa. La tradición de la arquitectura italiana es mantener separados los tres edificios.
Arquitectura medieval es una expresión historiográfica que engloba la producción arquitectónica del arte medieval.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario